BARRANCO DEPORTIVO RÍO VERDE

El barranco deportivo Río Verde se ubica en el sector granadino del Parque Natural Sierras de Tejeda, Almijara y Alhama, en el término municipal de Otívar. En realidad, el tramo permitido para el descenso se conoce como barranco de las Chorreras, cuya cabecera está conformada por los barrancos de los Madroñales y de la Cueva de Funes (al oeste), el de los Chortales o de las Cabrerizas (al norte) y, finalmente, el del Pito (al este). Todos estas barranqueras se podían descender, pero una acertada decisión de la dirección del Parque ha permitido la protección de estos valiosos ecosistemas y de alguno de sus elementos más significativos, como la cascada de los Árboles Petrificados, en el barranco de los Chortales o las chorreras de la Cueva de Funes o de los Tres Saltos en el barranco de Funes. El acceso para los barranquista se lleva a cabo a través del carril de las Cabrerizas, el cual se deriva de la carretera GR-5040, llamada de la Cabra Montés. El regreso lo hicimos por el sendero de uso público Río Verde, con el cual confluimos en el acceso. Tras llegar a la poza Central, se puede continuar el descenso, tanto por el sendero de los Puentes Colgantes, como por el propio cauce, hasta afluir al carril de la Cooperativa de Cázulas, cuyo acceso se realiza entre los kilómetros 42 y 43 de la misma carretera; eso si, previo pago de un peaje por vehículo y personas.

Las chorreras de la Cueva de Funes, también llamadas cascadas de Funes o chorreras de los Tres Saltos, forman parte del barranco de los Chortales. Aguas arriba se halla la bonita pantaneta de Funes. Hace unos años, se tomó la acertada decisión de prohibir el descenso  para preservar el travertino

El grupo conformado por Enrique, Herminia, Mena, Vicky, Paco, Dani y Jessica

Dani en un destrepe

Aquí vemos a la sonriente Vicky

Enrique y Dani

Herminia

El barranco es delicioso y no tiene mucha dificultad en su progresión

El primer rapel que se puede saltar

A continuación viene un tobogán

Después, otro

Otro rapel que se puede saltar o descender en tobogán tras bajar por una cuerda fija hasta la mitad de la chorrera. La llaman el Rompevertebras, así que mucho cuidado. El que desciende es Paco

Ahora le toca el turno a Vicky

Enrique baja rapelando 

Desde la poza de este rapel-tobogán, se puede acceder a una cornisa para saltar. Ojo, es peligroso si no se tiene experiencia. En la imagen vemos volar a Mena. En la siguiente, lo hace Dani

Los saltos se suceden

Y las badinas de aguas claras y profundas

Herminia se lo paso pipa

Una mariposa camuflada en la roca

Otro tobogán algo incómodo

Mena, Herminia y Vicky

Este tobogán deriva en una marmita preciosa, como Vicky, la de la mirada que escribe libros

Una pequeña lagartija como representante de la fauna local. También vimos un macho montés de gran cornamenta

El mismo tobogán, más cerca

Una imagen general de este último tobogán y la marmita por donde desagua a la charca

Pequeños destrepes

Nos acercamos al final, a la cascada de la Y

Dani por la izquierda y Jessica por la derecha

Enrique se desliza por la roca pulimentada

Ya estamos en la cascada de la Y

Montamos dos cuerdas, una por la chorrera y otra en volado

Aquí se aprecia el por que del nombre de la chorrera

Enrique acaba el descenso en la bucólica poza Central

Ahora toca cambiarse y comer

Imagen de la cerrada de la cascada de la Y y la poza que precede a la Central

El regreso lo hacemos por el barranco del Lagarto, por donde discurre el sendero de uso público Río Verde

Dani y Jessica

La feliz Herminia

Todo el trayecto de regreso, es espectacular

Y con esta nube de evolución, de las que presagian tormenta, nos despedimos

NOS VEMOS EN LAS MONTAÑAS