La ascensión a La Maroma el pasado jueves 10 de febrero, marcó el inicio de un pletórico fin de semana montañero, pleno emociones y contrastes paisajísticos. La primera jornada nos llevó a la cumbre del cerro Donabuelo (1.830 m) y a la crestería del Selladero, una vía de acceso a la cumbre tejedense, menos conocida, pero con los suficientes atractivos para encandilar al senderista que de ello se precie.
El descenso lo llevamos a cabo por el conocido y abismal tajo Volaero y el umbrío andén del Salto del Caballo. Al llegar al collado de Rojas, dejamos por un momento el marcado sendero de uso público, para rendir pleitesía al anciano Tejo Abuelo. De vuelta al camino inicial, acabamos la marcha con un agradable paseo nocturno, con las estrellas como notarias de una jornada inolvidable.
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Teresa atisba el marcado collado junto al cerro Donabuelo (1.830 m) |
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Para llegar a la cumbre del Donabuelo hay que superar un gran caos de rocas |
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Desde el Donabuelo avistamos el profundo barranco de los Tejos |
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En la cumbre con la bandera de nuestro club: Pasos Largos |
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Dejamos atrás el Donabuelo e iniciamos la ascensión de las crestas del Sedallero |
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La Maroma desde los llanos de la Arena |
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Foto en la cresta del Sedallero |
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Ya estamos en la meseta de Sierra Tejeda, al fondo se ve Sierra Nevada |
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Estos son los hitos de La Maroma Oriental (2.066 m). situada un metro por encima del enclave donde se eleva el monolito de La Maroma. |
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La Maroma (2.065 m) |
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Los mares de nubes envolvieron la montaña y engrandecieron, más si cabe, el paisaje. |
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Los machos monteses, acostumbrados a la presencia humana, se dejan fotografiar |
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Nos acercamos al tajo Volaero |
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Estos cantiles son muy atractivos y se prestan para ser fotografiados |
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Este saliente es fotogénico a no poder más |
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El cónico cerro del Fuerte (de Sedella), se perfila entre las nubes |
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Para los que se quejan de que no salgo en las fotos, aquí me teneis |
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Para atravesar el Salto del Caballo nos tuvimos que calzar los crampones |
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Teresa junto al Tejo Abuelo |
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La cascada del Tejo Abuelo estaba congelada
NOS VEMOS EN LAS MONTAÑAS |
2 comentarios:
Pues nada, nunca subí el Donaduelo ese y el tejo Abuelo lo habré visto al pasar pero sin distinguirlo de los demás
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