- DISTANCIA: 13,8 km
- ALTURA MÍNIMA: 209 m
- ALTURA MÁXIMA: 920 m
- DESNIVEL SALIDA-LLEGADA: 59 m
- MAPA: 1065-II / 1:25.000 / IGN
- SOLICITUD DE TRACK: sendericus@gmail.com
El arroyo del Bote, uno de los grandes desconocidos de la Serranía, tiene sus nacederos en la cara este del cerro del Duque. Precisamente, el camino de Ronda a Marbella lo atraviesa en una zona donde forma una bonita cascada. El lugar fue habilitado por la Reserva Nacional de Caza de la Serranía de Ronda, con bancos, fuentes y un corto sendero por encima del carril. Este fue el lugar elegido para iniciar el descenso. Podríamos decir que el arroyo del Bote, con un caudal permanente, refleja perfectamente los ecosistemas fluviales de una buena parte de los ríos serranos. Nace en peridotitas pero al pronto se introduce en terrenos pizarrosos, donde la vegetación de ribera crea una maraña impenetrable para la luz solar. Aquí vemos, además de sauces, emborrachacabras y adelfas, numerosos helechos y hasta laureles. En el devenir de la ruta, nos salió al paso, a la altura de la finca La Alberquilla, un individuo con sus perros preguntando que dónde íbamos. Durante la charla, el citado dejó expresiones tales como que antes de pasar por allí tenemos que avisar y que no comparte nuestra filosofía; pensamiento profundo e interno: VÁYASE USTED AL CARAJO.
El arroyo del Bote recibe varios aportes en su transcurrir, pero entre ellos destaca uno que afluye por su margen izquierda, llamado arroyo Cienfuentes, el cual porta una cantidad de agua nada desdeñable. Además, se precipita en continuas cascadas, siendo su parte alta, la que cruza el carril de regreso, la más prometedora para instalar un descenso deportivo. El último tramo discurre por entre rocas bermejas, formando cascadas y pozas de gran belleza, aunque al llegar al Corchadillo, una vez más penetra en terrenos silíceos, donde la menor pendiente de las laderas y unas estrechas y alargadas vegas han dado vida a un núcleo poblacional sumergido en el inmenso bosque de resineros (saltus), donde se desarrollan hermosos huertos con cultivos de cítricos y tropicales (ager).
El regreso lo efectuamos por la pista que contornea Sierra Real y que discurre por la ladera que abriga por el poniente al valle del Arroyo del Bote; dicha circunstancia nos permitió atisbar todo el recorrido acuático. Concluimos la ascensión en el puerto de la Refriega, evocador nombre al igual que el de cerro del Duque, Plaza de Armas y otros topónimos cercanos que nos retrotraen a las guerras de guerrillas de mudéjares, después moriscos, contra las huestes cristianas a primeros del siglo XVI. Dicho puerto es una importante encrucijada de caminos y un mirador geológico excelente que permite distinguir de un vistazo las inmensas moles calizas de las sierra de Tolox, destacando el imponente Torrecilla (1919 m) y el Alcazaba (1699 m); igualmente, al noreste se vislumbra el valle del Río Verde, al cual presta sus aguas el arroyo del Bote, ya en el pantano de la Concepción, muy cerca de Istán. Al norte y oeste avistamos las sierras bermejas, con los cerros del Duque y Abanto, la sierra de las Trincheruelas y la Palmitera, con el Encinetas (1473) como la cumbre más alta en peridotitas. Desde el puerto, en terrenos silíceos, recorremos hacia el sur el carril al Castaño Santo por entre un alcornocal que recientemente ha sido descorchado. En breve espacio de tiempo damos por concluida la ruta, cerrando el círculo.
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Contemplamos el amanecer desde la Oreja del Burro. A la izquierda, la silueta del Torrecilla (1919 m), techo del occidente andaluz |
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Fuentes del Arroyo del Bote, punto inicial del recorrido |
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Nada más comenzar nos encontramos con los primeros rápeles |
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La vegetación es selvática |
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El amigo Isi, organizador de la ruta |
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Las zarzas y árboles caídos dificultan el progreso |
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A medida que vamos perdiendo altura, la maraña vegetal es menos espesa y nos permite progresar en mejores condiciones. Que bonitas estaban las flores de la viuda |
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En un tramo nos topamos con un sendero procendente de la cercana casa Guarín que vadea nuestro en dirección a los caminos que comunican, entre otras, las fincas de la Casa del Hoyo del Bote, La Alberquilla y el famoso Castaño Santo de Istán, uno de los árboles más antiguo de Andalucía |
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Se suceden las cascadas y pozas idílicas como esta |
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Las rocas mojadas resbalan un montón, por ello hay que caminar con cuidado |
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Isaac en pleno esfuerzo |
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Paco, el perro de Isaac, se portó como un campeón |
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Me caí |
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El gran Isi, entre los andaluces que mejor conocen los ríos de nuestro país |
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Vimos numerosas arañas, libélulas, ranas, además de un rebaño de cabras monteses bebiendo en el arroyo |
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Un odonato |
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Isaac y Paco, vaya pareja!! |
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En algunos tramos el arroyo se encajona formando cañones parecidos a los cahorros almijáricos |
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Dos anuros |
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Este, soy yo |
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Penetramos en terrenos peridotíticos |
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Las pozas, de mayor tamaño y profundidad, permiten saltar |
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Esta es la imagen que describe a los típicos ríos bermejenses |
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Se suceden los saltos y toboganes |
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Ahora vemos los pinos pinaster, las adelfas y palmitos llegar hasta la propia ribera |
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Una bella mariposilla |
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Al salir del arroyo y subir por la pista, descubrimos el nucleo poblacional del Corchadillo, que se extiende por la Vega Larga. Al fondo se distingue levemente el mar Mediterráneo |
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Detrás de Sierra Real asoma Sierra Blanca con la cumbre de la Concha |
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Por el fondo discurre el arroyo del Bote. El pico más alto es el cerro del Duque, cubierto de pinos resineros. A la izquierda del mismo se desarrolla un alcornocal |
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El cerro del Molinillo |
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El valle del Arroyo del Bote. Detrás se distingue el cerro Encinetas (1473 m) y el valle del Guadaiza |
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Nos acercamos al puerto de la Refriega |
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El cerro Alcazaba y en la ladera el pinsapar de la Yedra, visto desde el emblemático y estratégico puerto de la Refriega |
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El Torrecilla (1919 m) |
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Chaparros descorchados recientemente |
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Avistando el cerro del Molinillo y el carril que lo circunda, el cual nos ha traído de vuelta |
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Vista de norte a sur del valle del Arroyo del Bote. La casa de abajo es la de la Alberquilla
NOS VEMOS EN LAS MONTAÑAS |
4 comentarios:
Preciosa ruta Rafa. Te sigo desde Málaga con auténtica afición, aunque desde el dique seco por mi enfermedad. ¡Gracias por acercarme a tantos paisajes desconocidos para mí!
Gracias a ti Fran por seguirnos desde la red. Espero que esa enfermedad la superes pronto y puedas disfrutar en vivo de los maravillosos paisajes de nuestra tierra. Un abrazo
This is great!
Gracias Charlene
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