- DISTANCIA: 11,7 km
- ALTURA MÍNIMA: 703 m
- ALTURA MÁXIMA: 1.331 m
- ASCENSO ACUMULADO: 715 m
- SOLICITUD DE TRACK: sendericus@gmail.com
El domingo, 12 de agosto de 2012, con bastante calor aunque algo menos que lo soportado el día que hicimos el Aizkorri, nos desplazamos hasta el puerto de Urkiola, donde se halla el santuario de San Antonio de Urkiola, lugar donde dejamos el coche y emprendemos la marcha para subir al Anboto, una de las montañas más señeras de Euskadi. Por aquí discurren el GR-38 y GR-12. Seguimos las indicaciones de este segundo sendero por una pista que atraviesa una zona boscosa de repoblación donde abundan los alarces, pinos, abetos y otras especies forestales. El tramo es delicioso para caminar, pues la pendiente es mínima.
Dejamos atrás el bosque y nos plantamos en las campas de Asuntze. Aquí dejamos el carril y bajamos hasta la visible fuente de Pol Pol, cuyas aguas contienen gran cantidad de hierro. Seguimos por un minúsculo sendero hasta posicionarnos en el collado de Pagozelai. Ahora toca subir de verdad y se hace por el hayedo que crece sobre el pedregal.. Una vez en la cuerda se avanza hacia el este casi por la propia cresta; sin duda, el tramo más bonito y entretenido, en el que hay que pisar bien y usar si se hace necesario, las manos.
Desde la cumbre se disfruta de bonitas panorámicas, aunque la niebla no deja ver más allá de la comarca Durangaldea. Muy cerca de aquí se ubica la cueva de Mari, morada de un ser mitológico muy arraigado en la cultura vasca. Hemos visto fotos en otros blogs y su ubicación es espectacular.
Iniciamos el descenso con menos niebla y los claros dejan entrever otras montañas del entorno. Descendemos ahora por el carril y por el mismo camino de ida llegamos hasta la zona recreativa situada junto al santuario. Compramos unos helados caseros muy ricos y damos por finalizada esta interesante excursión.
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Primeros tramos del recorrido |
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Las campas de Asuntze |
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La fuente de Pol Pol |
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Avanzando por el minúsculo sendero |
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En el collado de Pagozelai |
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Dejamos atrás el hayedo y nos posicionamos en el collado de Agindi |
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Este es el tramo más delicado de la excursión |
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Panorámicas hacia el valle de Arrazola |
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En la cumbre de Anboto (1.331 m) |
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Abajo vemos el collado de Zabalandi |
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La espectacular crestería hacia el Alluitz (1.034 m) |
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Por aquí abunda la confiada chova piquigualda |
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Cuando descendemos se abre un poco la niebla |
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Ya estamos de nuevo en el hayedo calcícola |
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Al fondo vemos el monte Mugarra |
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Y con esta foto del Elgoín (1.243 m), damos por acabado el reportaje
NOS VEMOS EN LAS MONTAÑAS |
1 comentario:
Una de las excursiones que nunca defraudan en el país vasco. La niebla le da encanto
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